En medio de una accidentada salida de la terminal aérea, el mandatario federal se detuvo para levantar a una joven informadora que al caerse se lastimó un tobillo.

Previo a que abordara la camioneta que lo trasladó a San Luis Río Colorado, Sonora -donde esta tarde presentaba programas de la frontera norte y mejoramiento urbano-, la prensa local fue insistente con el Presidente para obtener una declaración, pero no tuvo éxito.

Después de que le lanzaron preguntas sobre diversos temas, y una reportera le preguntó si habría subsidio para la luz, López Obrador dijo: “así como tienes tú derecho a preguntar, yo tengo derecho a no contestarte”.

-¿Por qué no? -insistió la comunicadora

-Soy dueño de mi silencio -respondió el titular del Ejecutivo.

-¿Habrá plebiscito sobre la construcción de Constellation Brands?, obra cervecera que un grupo de ciudadanos y busca cancelar, con el argumento de impactará la disponibilidad de agua en la región.

-Voy a hablar de eso, pero no así.

-Díganos cómo

-No a las entrevistas banqueteras.

-Es lo único que nos deja, Presidente.

-Mañana, les invito en Tijuana... Parecen prensa fifí.

“Somos prensa y asalariados”, mencionó un comunicador y otros comenzaron a corear “información, información“.

Entonces el mandatorio se detuvo para ayudar a la reportera que se había caído. “Párate... arriba, arriba”, y le dio un beso en la mejilla.